III ESTACIÓN

Jesús cae bajo el peso de la cruz

Te adoramos Cristo y te bendecimos, pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo y a mí, pecador.

Del Profeta Isaías:

«Él cargaba y soportaba nuestros dolores; nosotros lo consideramos un castigado por Dios, golpeado y humillado. Pero él fue traspasado por nuestras rebeliones y quebrantado por nuestros crímenes (Is. 53,4-5)

Meditación extraída y adaptada del Vía Crucis Misionero del P. Luis Zazano

Las caídas forman parte del camino. En el estudio, en el trabajo, en la vida misma, todos tropezamos alguna vez. Pero lo importante no es quedarnos mirando lo que nos derribó, sino descubrir qué nos ayuda a ponernos de pie.

Aprender de Jesús significa levantar la mirada, confiar y seguir adelante con esperanza. Porque caer nos pasa a todos, pero solo quienes se sostienen en la esperanza encuentran la fuerza para levantarse y continuar.

Oración:

Jesús, el peso de la cruz te hizo caer, pero tu caída no fue derrota, sino un acto de amor para levantarnos con Vos. En nuestra fragilidad, también tropezamos, nos equivocamos y a veces nos alejamos de tu camino.

Señor, danos tu fuerza para no quedarnos en el suelo, para dejar atrás todo lo que nos aparta de tu amor y seguir caminando con la certeza de que, con tu gracia, siempre podemos volver a empezar.

Padre Nuestro, Ave María y Gloria.